martes, enero 30, 2007

“Tuquito” y el fin a los virus informáticos

Se trata de un sistema operativo creado por un grupo de jóvenes estudiantes argentinos. Se adapta a las necesidades del usuario, es compatible con los programas de Windows y no se ve afectado por “bichos” informáticos. La aplicación se basa en la arquitectura de Linux. Ya se utiliza en Espańa, México e Irlanda, entre otros países.
Es adaptable a las necesidades de cada usuario, es inmune a los virus informáticos y es compatible con los programas de Windows. Lejos de ser una adivinanza, se trata de las principales cualidades de “Tuquito”, un sistema operativo creado por un grupo de jóvenes estudiantes argentinos que ya es utilizado en el exterior. Usuarios e instituciones académicas de Espańa, México, Cuba, Canadá, Brasil e Irlanda ya pusieron en práctica este sistema informático libre, creado por estudiantes de la carrera de Ingeniería en Computación de la Universidad argentina de Tucumán, situada al noroeste del país sudamericano. Mauro Torres, uno de los cuatro creadores del sistema, explica que se trata de una alternativa a las aplicaciones que tienen licencia privada y código cerrado como Microsoft. Es que Tuquito es gratuito y tiene código fuente abierto, lo que permite que el usuario tenga la libertad de modificar el programa de acuerdo a su necesidad. “Cualquier persona tiene acceso a la funcionalidad de cada programa, dispone de libertades tales como la de modificarlo o emparcharlo en el caso que se necesite. El software libre se adapta al usuario, en cambio en lo privativo es el usuario el que se adapta”, destaca el estudiante. Programas clonados La aplicación creada por estos jóvenes de 22 ańos, que demandó cuatro ańos de investigación y diversas pruebas, cuenta con programas similares a los de Microsoft. Los creadores seńalan, en este sentido, que los usuarios ya tienen la estructura incorporada de Windows y sería complejo tratar de instalar un formato diferente. De esta manera, Tuquito posee el Evolution, un “clon” de la herramienta Outlook de correo electrónico; el editor de programación Quanta; el navegador Mozilla; el reproductor de video Mplayer; el OpenOffice, similar al MS Office; y hasta el AMSN, la copia del masivo programa de conversaciones instantáneas MSN. Chris Arenas, otro de los creadores del programa, aseguró que esta aplicación detecta automáticamente los discos rígidos ya instalados en el ordenador, además de cualquier escáner, todos los modelos de impresoras, cámaras de video y de fotografía digital. También permite acceder a diskettes desde el escritorio, la pantalla de inicio del sistema. Según Torres, la aplicación desarrollada en Argentina es compatible con los programas de Windows ya que un archivo del MS Office puede ser abierto dentro de un programa de Tuquito. O a la inversa. Es que estos jóvenes especialistas en informática no olvidan que la mayoría de los usuarios usan los productos pertenecientes a la compańía del multimillonario Bill Gates. Este entorno, además, puede ser bajado de Internet e instalado en un ordenador que también posea otro sistema operativo dado que, una vez encendida la máquina, el usuario puede optar por utilizar cualquiera de las dos alternativas, sin generar problemas en sus instalaciones o programas. Los creadores de esta aplicación aseguran que otra atracción consiste en ser inmune a los virus informáticos ya que no existen “bichos” para la arquitectura que utilizan estos programas. Esto les permitió no haber tenido que diseńar aún los cada vez más demandados antivirus. El padre del software libre Tuquito nació en el marco del Programa de Generación de Software Libre de la Universidad a la que asisten Torres, Arenas, Alfredo Ignacio Díaz y Franco Iacomella, los cuatro creadores del proyecto. Durante unos cuatro ańos, los jóvenes realizaron diversas pruebas junto a los profesores de la facultad, hasta llegar a la versión indicada que cumplía con los requisitos necesarios para los usuarios finales. El novedoso sistema operativo, con su correspondiente hardware y software, se puede instalar en el ordenador a través de un disco, en un proceso que demora unos 15 minutos. También se puede acceder a los programas dejando que corra el disco sin necesidad de instalarlo. Ambas opciones se basan en una infraestructura llamada Garfio, desarrollada por el propio Torres. Los creadores afirman que tanto su instalación como su utilización es muy sencilla y no requiere de experiencia previa por parte del usuario. La aplicación se basa en la arquitectura de Linux, el sistema operativo creado en 1984 por Richard M. Stallman, padre del movimiento “software libre”. El especialista en informática, que se constituyó como líder de esta corriente al lanzar el proyecto GNU, también fundó la Free Software Foundation, una entidad referente en este campo. La influencia de Stallman en los sistemas de código abierto ha sido esencial para establecer el marco de referencia moral, político y legal de este movimiento, alternativa al desarrollo y distribución del software privado. Según aseguran sus usuarios, Linux nació ante el avance de intereses comerciales que supone el software privado. Así fue como Stallman encabezó esta nueva comunidad y creó un sistema operativo que se constituyó como alternativa a la aplicación Unix y al que bautizó GNU, que es usado hoy por unas 30 millones de personas, según el propio creador. En este sentido, un estudio de Servicios IT en Grandes Empresas realizado por Prince & Cooke sostiene que el 35 por ciento de las grandes compańías del mundo poseen aplicaciones Linux, en tanto cerca del 18 por ciento realizará una migración en los próximos meses. El avance de este movimiento y la creación del GNU allanaron el camino para que nacieran sistemas como el Tuquito, que en los próximos meses lanzará una nueva versión, que se encuentra en pleno desarrollo. Sistema de exportación La difusión de Tuquito en el exterior hizo que los cuatro jóvenes de la provincia de Tucumán, situada a unos mil 300 kilómetros al noroeste de Buenos Aires, fueran invitados a brindar charlas académicas en Espańa y Brasil. Torres seńala que el programa ya comenzó a ser utilizado por algunas universidades del exterior y están a punto de ser implementados en las oficinas pertenecientes a la Gobernación de Tucumán. Pero este distrito no es el único estamento estatal que viró hacia el mundo del software libre. De hecho, en el Estado argentino existe la iniciativa denominada Ámbito de Software Libre en el Estado (ASLE), que promueve el uso de estas aplicaciones en todas las provincias. Incluso, las oficinas de la Presidencia de la Nación, la Jefatura de Gabinete y hasta las dependencias de provincias como la norteńa Jujuy hasta Tierra del Fuego, situada en el extremo sur del país, ya utilizan estas herramientas. Esta expansión del software libre en el país facilitó la inserción de Tuquito en la Gobernación de Tucumán. Ahora, el desafío es que esta aplicación también empiece a ser usada por empresas, según cuentan sus creadores. “Sería una victoria de este tipo de herramientas y de todas las personas que están detrás de este tipo de actividades”, se esperanza Torres, a quien aún le restan unos tres ańos para graduarse. Para estos jóvenes, que se jactan de no haber encontrado fallas en el sistema que no pudieran resolver, el objetivo de esta herramienta es intentar reemplazar los entornos privativos por otros totalmente libres y gratuitos como lo es Tuquito. Los creadores explican que los programas son fáciles de manejar y, además, se instalan rápido. Y a la hora de proyectar, indican que el propósito es, en un futuro, formar una comunidad alrededor de este proyecto para que se pueda mantener solo. El principal objetivo de los jóvenes creadores -está claro- es difundir a Tuquito, que debe su nombre a un insecto típico de Tucumán. Para eso, lanzaron una campańa que consiste en enviar una copia del sistema operativo a numerosos lugares de Argentina, sin ningún costo./EEF ppmt2007.-

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